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7 tips del estilo nórdico

Todas las claves de la decoración

El estilo nórdico, también conocido como estilo escandinavo, se ha convertido en una tendencia muy popular en la decoración de interiores. Caracterizado por su simplicidad, funcionalidad y elegancia minimalista, este estilo tiene la capacidad de crear ambientes acogedores y armoniosos. En este blog, te presentaremos las principales claves del estilo nórdico para que puedas incorporar su encanto a tu propio hogar.

Paleta de colores neutros: El estilo nórdico se caracteriza por el uso de una paleta de colores neutros, como blancos, grises y tonos tierra suaves. Estos colores crean una sensación de luminosidad y amplitud en los espacios, además de transmitir una atmósfera tranquila y relajante.

Abundancia de luz natural: La luz natural es fundamental en el estilo nórdico. Las grandes ventanas sin cortinas pesadas permiten que la luz del día inunde los espacios, aportando una sensación de frescura y conexión con la naturaleza. Si tus ventanas no son muy grandes, puedes utilizar espejos estratégicamente colocados para reflejar la luz y crear la ilusión de amplitud.

Madera clara y materiales naturales: La madera clara es un elemento clave en el estilo nórdico. Los muebles y suelos de madera aportan calidez y textura a los espacios, al tiempo que mantienen la simplicidad y la pureza del estilo. Además de la madera, otros materiales naturales como el lino, el algodón y el cuero suave son comunes en la decoración nórdica, añadiendo una sensación de confort y serenidad.

Mobiliario funcional y minimalista: En el estilo nórdico, menos es más. El mobiliario se caracteriza por líneas simples y limpias, sin adornos innecesarios. Las piezas son seleccionadas cuidadosamente por su funcionalidad y calidad, priorizando el uso inteligente del espacio. Además, se fomenta la incorporación de muebles con almacenamiento integrado para maximizar el orden y la organización.

Textiles acogedores: Para contrarrestar la frialdad de los colores neutros y los materiales naturales, se utilizan textiles suaves y cálidos en la decoración nórdica. Cojines, mantas y alfombras de lana o tejidos de punto aportan textura, calidez y confort. Los estampados suelen ser geométricos y de líneas simples para mantener la armonía visual.

Cojín de algodón con flecos

Elementos naturales y plantas: El estilo nórdico busca traer la naturaleza al interior. La presencia de plantas y elementos naturales, como ramas secas o piedras, aporta vida y frescura a los espacios. Además, las plantas purifican el aire y crean un ambiente saludable.

Detalles minimalistas y orden: En el estilo nórdico, se valora el orden y la ausencia de elementos superfluos. Los espacios se mantienen despejados, y los accesorios decorativos se eligen con cuidado. Se privilegian los objetos con formas simples y elegantes

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